El municipio argentino bonairense de Hurlingham dio el primer paso en lo que podría significar un avance sanitario de mayor escala en el uso medicinal del cannabis en el país. Según se lee en Página 12, el Concejo Deliberante local aprobó una ordenanza que faculta al gobierno comunal al cultivo público y comunitario de plantas cuyos derivados podrán ser destinados tanto para la investigación como para el tratamiento de personas que necesiten aceite o derivados, y de manera gratuita.
La ordenanza fue impulsada por Annanda Cultiva, una ONG local integrada por un padres y madres de un centenar chicos con enfermedades complejas y tratamientos con aceite de cannabis. La elaboración del texto hasta su presentación llevó más de un año y finalmente se aprobó la semana pasada.
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